Sólo el aprendizaje tiene el potencial de transformar un fracaso en un gran éxito.
De ahí que hoy en el orbe más de 200 millones de jóvenes abarroten las aulas universitarias en busca del anhelado conocimiento que les permita labrarse un mejor porvenir.
En las últimas dos décadas el porcentaje de muchachos en edad estudiantil que se inscribieron a una universidad pasó del 14% al 32%.
De igual forma en México, la educación superior crece y ya hay más de 7 mil instituciones que ofrecen estos cursos.
De la década de los 70 a la fecha el número de matriculados por año se aceleró desde los 270 mil a cerca de los 4 millones 400 mil.
Sin embargo, una cantidad relevante de estudiantes abandonan su formación.
De acuerdo con datos de la OCDE sólo 56.3% de los mexicanos inscritos llegarán a su graduación...
La letra por la computadora entra...
Asimismo, la llegada de la pandemia derivada por el Covid-19 significa un enorme reto para mantener el interés de los inquietos jóvenes.
En ese contexto, recientemente la firma de consultoría EY, al mando de Víctor Soulé García, dio a conocer su estudio "El Impacto del Covid-19 en la Educación Superior", el cual recoge la perspectiva de 4 mil 800 estudiantes en México, Colombia y Perú.
Al detalle, prácticamente dos terceras partes de ellos se encuentran inscritos en programas presenciales; sin embargo, la pandemia llevó a la mayoría de las universidades a migrar a formatos digitales o a suspender clases.
En México 14% de las instituciones cerraron sus puertas de forma temporal, mientras que los cursos en línea aumentaron desde el 15% al 82%...
Maestro pixel...
Como quiera, la infraestructura tecnológica podría ser el reto a vencer.
Hoy en el país apenas 53% de los hogares cuenta con una conexión de Internet y sólo 45% tiene una computadora.
Si bien las tabletas y laptops podrían ser otra vía de acceso, la encuesta hace ver que apenas 55% de los jóvenes en escuelas privadas tiene uno de estos dispositivos personales, mientras que en instituciones públicas la cifra se desploma hasta el 20%.
A lo anterior sume la falta de preparación por parte de las propias instituciones para proveer a sus catedráticos de la infraestructura digital necesaria, a fin de mantener la calidad de sus servicios.
Un 34% de estas clases se llevan a cabo mediante Google Class room y 23% por Zoom y son pocas las que han invertido en una sólida plataforma digital propia.
Además 18% de los jóvenes apunta que una parte importante de la experiencia universitaria es la capacidad de interactuar con otros estudiantes, por lo que muchos podrían tomar un sabático.
En general, el sector académico estima que para el próximo semestre las inscripciones podrían caer en un 20%.
Así que en plena revolución digital universidades desconectadas...